No pudo ser. Pese a ir de menos de más y plantarle cara al Real Madrid, el Granada CF no pudo sumar pero sí ofreció lo que como mínimo se exige desde la grada: casta, arrojo y dignidad. La diferencia la marcó la escasa pegada que tuvo el cuadro rojiblanco, que pudo empatar si Estrada Fernández, en el minuto 84, hubiese estimado punible un claro penalti de Casemiro sobre Diego Buonanotte. Al margen de ello, se ofreció una buena imagen en la segunda mitad ya que costó arrancar y perderle el respeto al subcampeón de Liga pero cuando se hizo los de Anquelotti no estuvieron cómodos. La única pega, la falta de mordiente. Pero esto acaba de empezar.
Sin un hombre eminentemente defensivo en el centro del campo, el triángulo formado por Modric-Isco-Özil campó a sus anchas cuando el cuero pasaba por sus botas. Esto, ayudado por los cambios de orientación de Ramos hacia la derecha, exigió a Dani Benítez un desgaste extra para ayudar a Brayan Angulo, desbordado por su flanco. Así llegaron las mejores ocasiones del Real Madrid. La primera, a los cuatro minutos que Benzema no aprovechó tras un buen servicio de Di María.
El Granada CF, por su parte, se limitaba a tratar de sorprender a la contra y sólo Brahimi dio algo de luz al ataque rojiblanco cuando recibía el cuero. Pero una nueva aparición del argentino, ayer vestido de azul, terminó en gol tras un mal control de Cristiano Ronaldo que dejó el esférico en bandeja a Benzema, que tan sólo tuvo que empujarlo a la red .
Los de Alcaraz estaban a merced de su rival, que pudo hacer el segundo al cuarto de hora por medio de Özil, pero Roberto salvó con los pies. Pese que el Madrid era dueño y señor del choque, El Arabi pudo establecer el empate tras un saque de esquina en el que el cuero le llegó a Nyom, y éste habilitó al marroquí, que estuvo lento en la conducción y golpeó flojo con la izquierda.
Con Piti sin demasiada presencia en el juego ofensivo al carecer su equipo del balón, El Arabi tan sólo intervenía cuando se asociaba con Brahimi, el mejor de los suyos en el primer acto gracias a su capacidad de desborde.
La ventaja en el marcador hizo que los de Carlo Ancelotti se relajaran en el último cuarto de hora, en el que tan sólo destacó un gol anulado a Özil tras una falta ejecutada con el esférico en movimiento por Di María y un tímido remate de cabeza de Pepe.
En la última acción peligrosa del primer tiempo, una combinación entre El Arabi y Brahimi no encontró rematador. Se había salido vivo de una primera mitad en la que estuvo a merced del conjunto madridista en la primera media hora.
Sorprendió Lucas con la entrada de Riki por El Arabi. El míster rojiblanco quería del madrileño que retuviera el cuero cuando llegara arriba, aprovechara sus arrancadas desde banda y sobre todo tratara de competir en lo físico con Pepe y Ramos, tarea harto complicada.
El descanso le sentó bien al Granada. El duelo se tornó mucho más abierto y ahí los locales ofrecieron su mejor versión.
La primera jugada polémica del duelo llegó con un centro de Nyom que despejó Arbeloa con el pecho aparentemente. Faltaba más posesión y desde el banquillo se buscó una solución con la entrada de Fran Rico. Y a partir de ahí todo fue más fluido. A Isco y Modric le costaba volver hacia atrás, algo que trató de arreglar el técnico italiano con la entrada de Casemiro. Con el brasileño en el campo, Isco se liberó y pudo dejar liquidado el partido tras una acción personal que salvó Roberto y el palo. Cristiano lo intentaba desde fuera del área en un par de ocasiones pero pese al cansancio, el Granada tiró de casta.
El resultado pudo cambiar si Estrada Fernández hubiera señalado un claro penalti de Casemiro sobre Buonanotte que, tras eludir a Arbeloa, ganó línea de fondo siendo derribado por el ex del Sao Paulo. Una decisión que encendió a la grada y que animó a los rojiblancos, que en un último arreón buscaron el empate tras una gran acción personal de Piti cuyo centro al corazón del área despejó Pepe cuando Riki tenía la caña preparada.
Se intentó por todos los medios pero la diferencia está en las áreas y eso se paga. Se cayó con dignidad y ello lo apreció la grada, que despidió a los suyos con una ovación.
GRANADA CF 0-1 REAL MADRID
GRANADA CF: Roberto; Nyom, Diakhaté, Mainz, Angulo; Iturra, Yebda (Fran Rico, min.68), Benítez (Buonanotte, min.75), Brahimi, Piti (Fran Rico, min.88); El-Arabi (Riki, min.45)
REAL MADRID CF: Diego López; Arbeloa, Sergio Ramos, Pepe, Marcelo (Nacho, min.60); Modric, Ozil (Casemiro, min. 64), Di Maria (Carvajal, min. 88), Cristiano Ronaldo, Isco; Benzema. GOLES: 0-1, Benzema, min.10.
ÁRBITRO: Estrada Fernández, del colegio catalán. Amonestó a Mainz, Iturra, Brahimi, Piti por parte de los locales, mientras que por el lado visitante vieron la amarilla Marcelo y Pepe.
INCIDENCIAS: Encuentro correspondiente a la segunda jornada de Liga disputado en el “Nuevo Los Carmenes”. El feudo rojiblanco no se llenó para recibir al equipo de Ancelotti, con unos 16.700 espectadores en las gradas.
El mejor: Nyom
FILIPINOS DEL GRANÁ
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